Hay una gran preferencia por el vidrio que también nos ha dado esas monumentales caguamas rendidoras; los ‘cheleros’ de barriga ancestral quizá dirán que no hay discusión y ésta es la mejor; sin embargo, la lata ofrece sus ventajas.
¿Lata o vidrio?
La cerveza se ha ofrecido en botella de vidrio desde hace más de 400 años y comenzó a enlatarse con éxito hasta la década de los 30. Se volvió popular en los años 80, cuando surgió este gran debate sobre si este formato alteraba el sabor de las bebidas, incluyendo otras como el refresco.
En principio, Cerveceros de México, la Cámara Nacional de la Industria de la Cerveza y de la Malta, explica que ambos soportes (vidrio y aluminio) tienen el objetivo de proteger a la cerveza del contacto con la luz y el oxígeno, sus dos grandes amenazas, pues una cerveza se puede arruinar de tres formas:
- Mantenerla a una temperatura alta durante mucho tiempo.
- Dejarla abierta durante un largo periodo.
- El contacto continuo con luz ultravioleta.
En torno a este debate ‘chelero’ surgen todo tipo de alegatos, no falta quienes dicen que la chela en lata sabe a metal, otros apuestan que la botella conserva mejor el sabor, y es que una gran parte de las cervecerías artesanales también sigue optando por el vidrio, aunque algunas sí han incursionado en la otra opción.
La mala noticia para los defensores de la caguama y el destapador es que, según dicha organización ambas creencias son equivocadas: “todo depende de la frescura de una cerveza, y mientras ésta se mantenga en estado óptimo, no hay por qué preocuparse si está almacenada en una lata o una botella y, de hecho, es preferible que esté en lata”.
Cerveza en vidrio
- Se enfría lentamente, pero se conserva así por más tiempo.
- Su tiempo de vida es menor que la lata.
- El color marrón del vidrio evita que la luz afecte directamente al líquido, pero ésta no lo evita en su totalidad, por lo que puede alterar su aroma y volverlo sulfuroso: una “cerveza azorrillada”, explica Cerveceros de México.
- De acuerdo con la comercializadora Maltosa, las botellas tienen una ventaja en cuanto a las latas cuando se trata de técnicas tradicionales, pues las segundas no pueden recibir la cantidad necesaria de CO2 para algunos estilos. Brew&Hub, un proyecto de cervecería independiente, coincide en que algunos expertos prefieren producir en botella porque permite un control exhaustivo sobre el producto final controlando así los niveles de carbonatación de la cerveza.
Cerveza en lata
- Se enfría más rápido, sin embargo, también se calienta a mayor velocidad.
- Evitan el contacto de la bebida con la luz, “es imposible que se ‘azorrille’”, afirma Cerveceros de México.
- “La lata ofrece básicamente la misma protección que el barril, pero en formato individual”, afirma Brew&Hub.
- Otros especialistas agregan que aluminio es un sello perfecto a la exposición de aire que permite conservar la frescura, lo cual no siempre es posible en la botella.
- Aunque las personas aseguran que les deja un sabor a metal, la realidad es que están recubiertas con polímeros que evitan que la cerveza entre en contacto con el metal; una abolladura sí puede afectar el sabor.
- Son más ligeras que el vidrio, también más seguras para transportar.
- Tiene un tiempo de vida de alrededor de año y medio.
Sea cual sea la que elijas, los especialistas aconsejan siempre beber la cerveza en un vaso, ya que esto permite percibir mejor sus propiedades.